- Los doctores Evarist Feliu y Manel Esteller, miembros fundadores de Barcelona Salut, destacan que el foco de atención del tratamiento de los pacientes afectados de leucemia y de otras hemopatías malignas se centra en la investigación
- El capítulo “Sangre: gotas de vida” de La Ciencia de la Salud -una idea original y coordinación de contenidos de Barcelona Salut- se emite mañana en TV2 entre las 13:00 y las 14:00 horas
La sangre es absolutamente vital. De ella dependen, entre otras funciones, la respiración celular de nuestros órganos y el transporte de nutrientes por todo el cuerpo. La leucemia es una enfermedad de la sangre debida a la proliferación incontrolada de células inmaduras que invaden la médula ósea -impidiendo la producción de las restantes células normales- y que posteriormente pueden pasar a la sangre periférica e incluso invadir cualquier órgano.
En el nuevo capítulo de La Ciencia de la Salud -una idea original y coordinación de contenidos de la Fundación Barcelona Salut-, que se emitirá mañana sábado en TV2 entre las 13:00 y las 14:00 horas, investigadores y médicos de prestigio internacional repasan los últimos avances en la lucha contra una enfermedad que podría ser cronificable en pocas décadas.
En paralelo, pacientes y familiares relatan cómo llegó el diagnóstico a sus vidas y dan detalles sobre su tratamiento y evolución. El episodio ahonda en las historias de pacientes anónimos y se detiene también en la experiencia vital del tenor Josep Carreras, un referente mundial en la lucha contra la enfermedad a través de la Fundación que lleva su nombre.
El episodio reúne en un apasionante coloquio dirigido por el Dr. Evarist Feliu, presidente de la Comisión Delegada del Instituto Josep Carreras y miembro fundador de Barcelona Salut, a algunos de los mejores especialistas en la enfermedad, entre ellos el Dr. Manel Esteller, director electo del Instituto de Investigación Josep Carreras y miembro también de Barcelona Salut.
El Dr. Feliu explica las diferencias entre la leucemia aguda y la crónica. La aguda se debe a una proliferación de células inmaduras que invaden la médula ósea (el órgano productor de la sangre) y que provocan una disminución de las células productoras de hematíes, de leucocitos normales y de plaquetas desatando en los pacientes cuadros de anemias, infecciones y hemorragias. Posteriormente, estas células pasan a la sangre periférica y también pueden invadir cualquier órgano del organismo. La leucemia crónica, en cambio, puede no dar síntomas durante muchos años; de hecho, es habitual que se diagnostiquen casos a raíz de una revisión médica rutinaria.
Coinciden los doctores en que hay dos tipos de cánceres de la sangre: los curables y los cronificables. Probablemente, en el año 2050 los cánceres hematológicos curables estarán curados y el resto serán cronificables, como ha ocurrido con la infección por VIH o la diabetes.
Precisamente por ello, el foco de atención del tratamiento de los pacientes afectados de leucemia y de otras hemopatías malignas se centra en la investigación. En este punto, el Dr. Esteller lo tiene claro: “El papel de la investigación coordinada y multidisciplinar es absolutamente trascendental; la investigación es la herramienta que nos va a permitir la curación de la leucemia y de los linfomas”. Es prioritario, sostiene, la formación de equipos integrados por especialistas en diversos campos, “entre ellos en exploración del Big Data, es decir, de los millones de puntos de información que ya existen”.
Subraya, en este sentido, que “ya hay mucha información genómica disponible y necesitamos juntarla y crear grandes consorcios internacionales para que los investigadores de distintos campos seamos capaces de compartir el conocimiento”. La hematología, hace hincapié, “ha de ser como una esponja que reciba conocimientos de áreas que ahora vemos como muy alejadas de nuestra especialidad”. La colaboración en red de hospitales y fundaciones es clave para vencer a la enfermedad.
Uno de los momentos más emotivos del episodio es la entrevista que el Dr. Feliu realiza a Josep Carreras en el Gran Teatre del Liceu. El tenor se recuperó en 1988 de la leucemia y, a partir de ese momento, ha dedicado su vida a combatir la enfermedad. “No pararemos hasta que curemos la leucemia”, sentencia.
Un mensaje de esperanza del Dr. Feliu cierra el programa: “En los años 60, prácticamente morían todos los enfermos de leucemia. Hoy en día los porcentajes de curación son cada vez más altos y esto nos anima mucho a seguir luchando para llegar algún día a vencer la enfermedad”.
Algunos tipos de leucemia llegan a un porcentaje de curación de hasta el 90 por ciento.
Vocación divulgativa
La nueva temporada de La Ciencia de la Salud cuenta con 13 capítulos de cincuenta minutos de duración cada uno. Rodados entre los meses de enero y mayo en diferentes ciudades españolas y con localizaciones en algunos de los hospitales de referencia del país, los episodios se emiten los sábados entre las 13:00 y las 14:00 horas; inicialmente por TV2, para pasar posteriormente a TV1 y al Canal Internacional de la televisión pública.
Cada capítulo aborda una especialidad médica desde el punto de vista de los pacientes y de los profesionales de la salud y lo hace en torno a varias historias reales (algunas de ciudadanos anónimos y otras de personajes de relevancia pública) y a la figura de alguno de los médicos fundadores de la Fundación Barcelona Salut, cuya presencia da cohesión a la narración.
Los monográficos restantes versarán diabetes, próstata, obesidad, esclerosis múltiple, depresión, tabaquismo, alergias, cirugía cardio vascular y enfermedades raras. En cada capítulo de La Ciencia de la Salud se repasan los últimos avances farmacológicos y en imagen médica relacionados con la especialidad abordada.
La Ciencia de la Salud nace de la vocación divulgativa y formativa de Barcelona Salut. La entidad, integrada por una cincuentena de prestigiosos médicos de todas las especialidades, impulsa iniciativas y proyectos destinados a la investigación, el conocimiento de las ciencias de la salud y la promoción de los hábitos de vida saludables, con el objetivo de reducir la incidencia de algunas de las enfermedades más frecuentes de la sociedad actual.